La fruta chilena está desplazando la producción local y ejerciendo presión a la baja sobre los precios.
Los envíos récord de cerezas chilenas este noviembre preocupan a los productores argentinos. Argentina ha experimentado una afluencia sin precedentes de fruta chilena desde principios de noviembre, lo que, según representantes del sector, tendrá un impacto significativo en el futuro. Dado que la mayor parte de la cosecha argentina se vende durante enero o febrero, la disponibilidad de cerezas chilenas más baratas ejercerá una presión a la baja cada vez mayor sobre los precios.
“En enero y febrero de este año, las importaciones de cerezas se triplicaron en comparación con el promedio de los últimos cinco años”, declaró Aníbal Caminiti, gerente de la Cámara Argentina de Productores Integrados de Cereza (Capci), a Más Producción . “No solo se desplomaron los precios, sino que se volvió difícil vender la fruta”.
De las 14.000 toneladas de cerezas que produce Argentina anualmente, el 50% se comercializa. Sin embargo, los elevados costos de producción, las tarifas eléctricas y los impuestos dificultan que los productores argentinos puedan competir con sus vecinos chilenos.
Para intentar paliar esta brecha, los productores argentinos han identificado diversas medidas de ahorro, como la reducción del precio de la electricidad, la agilización de la devolución del IVA a las exportaciones y la disminución de la carga tributaria. Sin embargo, estas medidas dependen de los gobiernos regionales y nacionales.
“Si lo analizamos desde la perspectiva del consumidor”, añadió Caminiti, “seguramente habrá más, porque las cerezas suelen ser caras para el consumidor argentino. Desde ese punto de vista, se podría decir que es beneficioso. Pero, desde la perspectiva del productor, la afluencia de cerezas chilenas significa que no podemos competir con los precios argentinos”.
Por otra parte, la Terminal San Antonio (STI) de Chile dio el pistoletazo de salida a sus envíos marítimos de cerezas chilenas el martes en una ceremonia a la que asistieron Frutas de Chile y la ministra de Agricultura, Ignacia Fernández.
El número de embarcaciones disponibles aumentará a 32, incluyendo cuatro servicios Cherry Express. Actualmente, STI, operada por Hanseatic Global Terminals y SSA Marine, es la terminal chilena con mayor número de servicios durante la temporada de cerezas.
Alrededor del 90 por ciento de las cerezas frescas de Chile se envían por mar, y el Cherry Express tarda solo 23 días en llegar a China.
“Nuestra oferta de servicios directos demuestra que somos el principal punto de partida de las cerezas chilenas destinadas a Asia. El sesenta por ciento de los servicios de Cherry Express, que son esenciales para reducir los tiempos de tránsito entre Chile y China, operan en STI”, afirmó el gerente general de STI, Andrés Albertini.
“Esto nos exige seguir fortaleciendo la competitividad del sector y reforzando nuestro compromiso de brindar una operación continua, eficiente y segura para los exportadores.”
Según estimaciones del Comité Chileno de la Cereza, se prevé que las exportaciones para la temporada 2025/26 alcancen los 131 millones de cajas, equivalentes a 655.000 toneladas.
“Cada temporada de cerezas presenta un desafío logístico a gran escala. La coordinación entre los diversos actores de la cadena de suministro es clave para mantener la competitividad del sector y seguir posicionando a Chile como líder en exportaciones de fruta”, afirmó la directora ejecutiva del comité, Claudia Soler.