Camboya ha cerrado sus cruces fronterizos con Tailandia, mientras continúan los combates entre las dos fuerzas el sábado a pesar de que el presidente estadounidense Donald Trump dijo anteriormente que habían acordado un alto el fuego.
Los cruces estarán cerrados hasta nuevo aviso, según el Ministerio del Interior de Camboya.
Anteriormente, el primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, dijo que le dijo a Trump que un alto el fuego sólo sería posible después de que Camboya hubiera retirado todas sus fuerzas y eliminado las minas terrestres.
Las autoridades tailandesas informaron que cuatro soldados murieron el sábado, mientras ambos bandos reportaban continuos bombardeos e intercambios de artillería. Camboya no ha actualizado su cifra de bajas militares.
El Ministerio de Defensa de Camboya dijo que aviones de combate tailandeses bombardearon edificios de hoteles y un puente, mientras que Tailandia informó que varios civiles resultaron heridos en un ataque con cohetes camboyanos.
Las cuatro muertes del sábado elevan a 15 el total de militares muertos en Tailandia desde el lunes, con 270 heridos. Seis civiles también resultaron heridos.
El viernes, Camboya dijo que al menos 11 civiles habían muerto y otros 59 habían resultado heridos.
Al menos 700.000 personas han sido evacuadas en ambos lados de la frontera.
Trump había afirmado a principios de semana que podía detener los combates entre las fuerzas tailandesas y camboyanas que estallaron el lunes simplemente levantando el teléfono.
Después de hablar con ambos primeros ministros el viernes por la noche, escribió en las redes sociales que los dos países habían acordado «cesar los disparos a partir de esta noche» y volver al acuerdo que firmaron frente al presidente de Estados Unidos en octubre.
«Ambos países están listos para la paz», escribió.
Pero en sus comentarios después de hablar con el presidente estadounidense, ninguna de las partes mencionó un alto el fuego inminente.
Anutin afirmó haberle dicho a Trump que Tailandia no era el agresor y que Camboya debía demostrar que había retirado sus fuerzas y retirado las minas terrestres de la frontera antes de que fuera posible un alto el fuego. «Primero deben demostrárnoslo», afirmó.
Los dirigentes camboyanos dijeron que deben seguir luchando para proteger la soberanía de su país.
No se mencionó el uso de aranceles como herramienta para obligar a las dos partes a distanciarse, como ocurrió en julio.
Tailandia ha advertido a Estados Unidos que no vincule el conflicto con el comercio.
El sábado, Camboya informó que había sido golpeada por más ataques aéreos tailandeses.
«El 13 de diciembre de 2025, el ejército tailandés utilizó dos aviones de combate F-16 para lanzar siete bombas» sobre varios objetivos, dijo el Ministerio de Defensa de Camboya en una publicación de X.
«Los aviones militares tailandeses aún no han dejado de bombardear», añadió.
El ejército tailandés también confirmó que los combates continuaron.
La prolongada disputa fronteriza se intensificó el 24 de julio, cuando Camboya lanzó una andanada de cohetes contra Tailandia, que respondió con ataques aéreos.
Ambos países se han acusado mutuamente de iniciar los ataques.
Tras días de intensos combates que dejaron decenas de muertos, los países vecinos del Sudeste Asiático acordaron un alto el fuego inmediato e incondicional, negociado por Trump y el primer ministro malasio, Anwar Ibrahim. Este acuerdo se formalizó en una ceremonia celebrada en Malasia en octubre, presidida por el presidente estadounidense.
Sin embargo, ambas partes continuaron intercambiándose acusaciones de violaciones del alto el fuego, y Tailandia publicó evidencia de que tropas camboyanas habían colocado minas terrestres, las cuales han causado la pérdida de extremidades de siete soldados tailandeses. Camboya afirma que las minas son vestigios de la guerra civil de la década de 1980.
Desde entonces, las tensiones siguieron aumentando.
Esta semana, Tailandia lanzó ataques aéreos en Camboya después de que dos de sus soldados resultaran heridos en una escaramuza el domingo pasado. Camboya respondió con bombardeos de cohetes. Los combates afectaron a seis provincias del noreste de Tailandia y seis provincias del norte y noroeste de Camboya.
Ambos países llevan más de un siglo disputando su frontera terrestre de 800 km. La frontera fue trazada por cartógrafos franceses en 1907, cuando Francia era el país colonial de Camboya.